Un día icónico. Un día que normalmente no es tenido en cuenta en la historia universal, pero que debería serlo. Esto es, al lado de otros eventos como la Masacre de Boston y La Toma de la Bastilla, una ocurrencia significativa, que cambio el diario vivir, la sociedad y manera de gobernarse de millones de personas.
Lo que ocurrió el 11 de noviembre, en un puerto estratégico español, habitado por personas de origines diversos, no fue una simple revuelta.
En tal fecha, la España del momento se enfrentaba a Napoleón Bonaparte y el régimen impuesto por su hermano, José Bonaparte, apodado “Pepe Botella”. En resta guerra, denominada la Guerra Peninsular, los españoles leales al rey Borbón, Fernando VII, aliados con Portugal y Gran Bretaña, habían perdido la habilidad de ejercer la misma autoridad directa de antes en sus colonias. Lo que llevó a la conformación de juntas regionales en todos los virreinatos de la América Española. Tales juntas, ejercieron el poder de facto en las colonias, a pesar de decir que seguían siendo leales a España y a Fernando.
Una de esas muchas Juntas, fue la Junta de Cartagena. Esta junta, conformada por militares, mercantes, estadistas y políticos locales, se encontraba en la corriente de la ilustración. Inspirada por la independencia de los estadounidenses en Norteamérica, las ideas de “Liberté, Fraternité, Egalité” de la Revolución Francesa,
y las revueltas que ocurrían en otras partes de América, la junta declaró su independencia absoluta de España un 11, del mes 11, de 1811.
Seguido de este grito de independencia, juntas en otras partes del Virreinato de la Nueva Granada (lo que conforma a Ecuador, Panamá, Colombia y Venezuela), empezaron a sublevarse. En Quito, se redacta la constitución de 1812, mientras que mas partes de la Colombia actual se rebelan contra el régimen del virrey. En 1813, Bolívar emprende la “Campaña Admirable” en Venezuela, liberando Caracas ese mismo año.
A pesar de la Reconquista de Morillo en 1814-1815, Cartagena volvió al protagonismo, representando el pilar de la resistencia contra el régimen colonial con el Sitio de Cartagena. Desde el 26 de agosto hasta 6 de diciembre, Cartagena resistió las estocadas de Morillo. Cuando cayó la ciudad el 6 de diciembre, está ya se había convertido en un foco ideológico de resistencia y lucha contra los poderes de la tiranía, de una manera que mantendría la llama revolucionaria prendida a pesar de la ejecución de los líderes revolucionarios en Santa Fé de Bogotá. Tal llama entonces, brilló a su mayor intensidad en los años venideros; hasta que, en 1819, los Generales Bolívar y Santander, derrotaron a los españoles en Bogotá.
Pero esto, ¿Qué tiene que ver con Cartagena, y con el día de hoy? La verdad es que todo. Toda la historia humana es una cadena de eventos, que se ve entrelazada por las acciones de aquellos que actúan a favor o en contra de la situación actual. La grandísima importancia del 11 de noviembre es que sirve como uno de los motores centrales por los cuales se inició la lucha contra el Status Quo de ese entonces. Ya que sirve como un ejemplo histórico de determinación y coraje, alimentado por los ideales de República, de igualdad y de Libertad.
Por ende, allí reposa la importancia de esta fecha. No solo en el hecho de ser un evento central en nuestra corriente independentista, sino también por ser nuestra historia de cómo los hombres, mujeres y niños valientes de Cartagena, dieron cada suspiro, cada esfuerzo y cada gota de sudor y sangre, para poder salvaguardar las ideas republicanas que sedimentan la sociedad colombiana de hoy en día. Ciertamente, los esfuerzos de la Heroica, para con nuestra libertad y nuestros principios, merecen ser siempre recordados.
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